Grado de dificultad: 2 (El tema de la piratería es complejo, pero no por razones técnicas)

Columnista: Roberto

El presente artículo se aprovecha de una salida cinematográfica para dar un testimonio personal sobre una situación que considero injusta.

Otros artículos se interesarán a la película como tal… Cuando estará disponible en sala oficialmente (a la fecha de redacción del presente post no lo está)

“Alita, Battle Angel”, una publicidad invasiva

Preestreno

Hoy en mi correo electrónico, encontré una publicidad de Cinemark, la franquicia de salas de cinema, presente en Colombia entre varios otros países.

Recibo comerciales de ellos porque cometí el error de conseguir una “tarjeta gold”, que nunca uso porque prefiero disfrutar de las películas en una pantalla que no comparto con nadie sino mi familia.

Llámenme egoísta si quieren, efectivamente lo soy: no me gusta compartir los chasqueados del vecino bulímico, ni las patadas en la espalda del hiperactivo de atras, ni los “perdón” de los que llegaron tarde, y otras ricuras.

Aun así, es bien posible que vaya a mirar en teatro la película de la cual acabo de recibir la publicidad. Esta película es “Alita, Battle Angel” dirigida por un tocayo, Robert Rodriguez.

correo Cinemark

Dicen que el “preestreno” es para el 13 de febrero, y que se propone comprar los tiquetes por anticipación. Buen negocio para ellos, si lo logran.

Ya había anotado esta película en mis tabletas, así que gaste unos minutos a ver en cual sala la “iban a proyectar”. Note que la fecha del 13 de febrero era el día anterior a la fecha oficial de salida.

Disponibilidad “anticipada”

Eso explicaba la palabra “preestreno” … A este momento, me hice una pregunta sarcástica: ¿El día de estreno no ha llegado, pero será que está ya disponible, de manera más “informal”?

Es relativamente fácil de enterarse de la disponibilidad de películas por canales informales. No pretenderé que se necesita ser muy hábil para eso, ni para luego descargarlas.

Casi sin sorpresa, descubrí que efectivamente estaba disponible… Es una de estas descubiertas que no generan ninguna alegría. Parece un concurso de velocidad ridículo de quién estará capaz de piratear una película lo más temprano posible.

Notaran que escribí la palabra fatídica: “piratear”. Esta palabra tiene en mi vocabulario un significado preciso.

Se refiere al hecho de no estar ni siquiera capaz de esperar la salida de una película, solo por el placer de poder alardear de un robo inútil: es una actitud mediocre.

Se asocia, además, con un “espíritu de lucro” (AKA venta de copias ilegales). La palabra clave es “venta”, que describe un doble robo: del lado de los artistas que participaron a la película, y del lado de la gente común, por venderle (barato, por supuesto) algo que no les costó nada.

El “inframundo”

Preguntas necias

Pero a estos ladrones, no les van a pedir nada. Es a mí que harán quejas:

  • ¿Cómo así que supo tan fácilmente que la película estaba disponible?
  • ¿Por qué canal lo supo?
  • ¡Claro que la descargo, ha! ¡O tal vez hasta la compró en la calle!
  • ¡Que descarado, habla de ladrones, pero él también participa al robo!
  • ¡Es más, tal vez es uno de los que hacen estas copias!

¡Alto al fuego, por favor, que solo puedo contestar a una pregunta a la vez! Instructivas preguntas, por cierto…

Contestare a los hipotéticos acusadores, sabiendo que no son la población que lee normalmente los artículos de TMN. Les deseo, sin embargo, la bienvenida si leen este preciso articulo para saber un poco más del tema.

Es una prueba de apertura mental que saludo.

¿Cómo así que lo supe tan fácilmente? Porque practico Internet desde hace tres décadas, un universo que solo se volvió selectivo e intolerante desde hace diez años.

“¿Por qué canal lo supe?” En el presente caso, por el siguiente:

Logo TPB

Nota: No detallare más de qué se trata y, sí, este sitio existe todavía (como varios otros).

Efectivamente la descargue y la vi, por eso el presente artículo. Por otra parte, me imagino que, si estaba disponible allí, debe estar también disponible en la calle. Consejo personal: no la compran, veremos más adelante por qué.

Finalmente, “no comprar” significa también “no vender”.

Autopsia de una película pirata

Comentarios preliminares

Alita, Battle Angel” es la adaptación cinematográfica de “Battle Angel Alita” un manga japonés en 9 episodios (銃夢en japonés, si creemos la definición de Wikipedia), del cual se hizo una primera adaptación en dibujos animados de dos episodios.

No hablare más de este manga que fue primero publicado hace 29 años, porque será el tema de otro artículo. Sin embargo, precise estas informaciones porque, por supuesto, el manga y su versión animada están también disponibles “por allí”.

Están disponibles y me parece una buena cosa, porque contribuye al conocimiento cultural universal, de manera mucho más eficiente que los canales oficiales, terriblemente costosos (la caja completa del manga vale 125 dólares en Amazon).

Conocer y coleccionar son dos cosas distintas, que los miembros del “inframundo” identifican muy claramente y practican.

Elementos técnicos

Descargue el archivo de la película a través de un VPN (uno nunca está demasiado prudente).

La calidad de imagen de este archivo es “HDCam”, una variante “alta definición” de “Cam”.

“Cam” es la calidad de imagen (y de sonido) la más fea. Se trata también de la técnica la más vergonzosa: un espectador privilegiado, que participa a una visualización preliminar, la graba en sala con una cámara escondida.

Son estas versiones que suelen tener momentos completamente desenfocados, y donde a veces se ve alguien pasar entre la cámara y la pantalla.

Esta “técnica” es vergonzosa por dos razones: la mediocre, o hasta pésima, calidad de imagen, y el hecho de que un privilegiado fue suficientemente traidor para aprovecharse de su estatuto para lucrarse (una actitud muy postmoderna).

Como lo pueden imaginar, “HDCam” no es sino un archivo “Cam” con los defectos amplificados.

Par completar su conocimiento de las diferentes etapas posibles, existen también (para otras películas, o series) versiones “Rip”. Esta “calidad” está mejor, porque se trata del archivo original limpio del vídeo:

  • HDRip se dice de una copia realizada a partir de una visualización sobre un canal de cable (via la interfaz HDMI)
  • WebRip, como lo indica su nombre, es un poco más fácil porque el archivo es la captura de un streaming sobre un un computador.
  • DVDRip y BRRip son más fáciles aun, porque solo se trata de extraer el archivo de un disco DVD o Blu-Ray.

Estas versiones reflejan diferentes etapas en la comercialización de las obras.

Para la película analizada, se trata de una versión de calidad fea, lo que se podía sospechar por la etapa muy temprana en la carrera de esta película.

Origen del archivo

Entramos en detalles sórdidos. En este caso, los publicadores ni se tomaron la molestia de esconderse: se trata de una organización que tiene un sitio web registrado.

Como puede tratarse de una organización delincuencial, no les revelare su nombre. Solo les diré que este nombre aparece incrustado en la imagen y que hay interrupciones comerciales.

En otros términos, no solo robaron la película, sino que la usaron como publicidad… Hermoso.

En la especie, es lo más lejos que me atreví en investigar. Más allá de este punto, es un dominio reservado a los servicios de policía.

¿Quién usa los canales informales y por qué?

El propósito del presente blog no es capacitar ni incentivar a acciones delincuenciales. No está, sin embargo, prohibido de hablar del tema y tratar de entender.

Una primera respuesta…

… A esta pregunta es la falta de disponibilidad de documentos, libros, videos, informaciones, series o películas “reputadas interesantes” (demasiado viejos, o restringidos geográficamente, o en otros idiomas, o reservados a cadenas inaccesibles).

Servicios como “Spotify”, “Deezer”, “Netflix”, “Amazon Prime”, “YouTube Premium”, son respuestas comerciales válidas a la pregunta, porque de costo alcanzable.

Al contrario, los operadores de cable, que dominan el mercado, siempre desconocieron las reales necesidades de sus suscriptores.

Los canales de televisión terrestre están en una situación peor: está lejos atrás el tiempo donde los espectadores aceptaban ser esclavos de los horarios muy variables practicados por ellos.

Disponibilidad cultural

El aspecto comercial de la cultura es claramente orientado hacia una elite afortunada: para tener acceso a un contenido cultural, se requiere tener recursos que muy poca gente tiene.

La celebridad de unos artistas esconde frecuentemente editores codiciosos que se lucran. La celebridad, que permite monopolizar la visibilidad, no es siempre sinónima de talento.

Un medio como YouTube está repleto de canales que permiten a artistas audiovisuales que no tienen respaldo, hacerse conocer sin tener que trabajar en la calle (lo cual es igualmente respetable, pero físicamente mucho más duro). Pero no siempre es así.

El tema es más complicado aun cuando se trata de literatura, de arte gráfico y de fotográfía: el principio de “derechos de autores” vuelve el acceso a la cultura blanco de ataque de tipo “patent troll”, y ni siquiera protege a los artistas.

Los únicos que parecen salvarse son las obras de teatro y los conciertos, por su forma única. Se trata, sin embargo, de formas muy costosas y de acceso limitado.

Opinión personal

En realidad, todo este articulo es una percepción personal. Soy un gran consumidor de cultura que sea artística o científica.

Pero los contenidos culturales están diseminados por todo el planeta, buena parte fuera de alcance “legal” por limitaciones geográficas o simplemente porque son a un precio inaceptable.

La situación es más grave aún con los contenidos tecnológicos y científicos, si tengo que limitarme a los escasos caminos oficiales disponibles.

Les doy un dato: ninguno de los nerdos que conozco se puede permitir este lujo, y no veo porque uno tendría que usar la disculpa del nivel académico para acceder al conocimiento.